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lunes, 13 de junio de 2011

RECETAS DEL MUNDO PARA NIÑOS Y MAYORES: MAKIZUSHI O MAKIS -SUSHI.

Aunque siempre asociamos la palabra sushi a pescado (crudo), el sushi puede hacerse con un montón de cosas, desde efectivamente atún o salmón crudo hasta ahumados, gambas cocidas, queso o tortilla.
Mi receta está adaptada a nuestros gustos y a la posibilidad de que lo coman niños ya que, aunque el pescado crudo del sushi ha sido previamente congelado a muy bajas temperaturas y como dice Carlos González, si algo es bueno y sano para ti, lo es para tu hijo, la mía tiene un año y parece un poco pronto para darle pescado crudo.

Para hacer sushi necesitamos algunas cosillas un poco especiales, pero que hoy en día podéis encontrar en cualquier hipermercado; arroz para sushi (imprescindible hacerlo con este arroz), una esterilla para hacer maki (es de madera), vinagre de arroz (también muy importante) y las algas para sushi, con estas 4 cosas es suficiente para poder hacerlo, ahora resulta interesante tener jejibre en conserva (que ya viene laminado), salsa de soja japonesa y guasabi (pasta de rábano picante, de color verde).
Para los madrileños que no lo conozcáis, en Principe Pío, en una callecita casi pegando al centro de comercial, hay una tienda con aspecto del "típico" super chino pero en su interior encontrareis multitud de productos alimentarios asiáticos, tanto japoneses como chinos e hindús, a unos precios más que razonables.

INGREDIENTES:


-350 grs. de arroz de sushi
-1/2 vasito de vinagre de arroz
- 1 cucharadita de sal y una de azúcar
- Unas 5 láminas de algas para sushi
-5 lonchas de bacon (o jamón york)
- 1 plátano
- 1/2 aguacate
- 1/2 pepino
- 4 0 5 palitos de surimi de cangrejo
- 1/2 surimi de langosta
-100 grs. de salmón ahumado
- 1 lata de atún natural
- Queso tipo philadelphia
- Mahonesa (mejor si es japonesa, pero la normal vale)
- 4 o 5 setas shiitake
- un poco de sésamo

MODO DE HACERLO:
Lo primero es poner el arroz en un tamiz o colador grande y lavarlo bien, más o menos hasta que el agua deje de salir blanca. No os olvidéis de este paso porque sino no saldrá bien.

Ponerlo a cocer en agua fria, la proporción suele ser 1 de arroz por 1 y 1/2 de agua. Cuando al agua se haya consumido pero no esté seco-seco, se apaga el fuego y se tapa, y se deja reposar 10 minutos. Luego se destapa y se deja otros 10 destapado. Mientras se disuelve la sal y el azúcar en el vinagre, y se añade al arroz, removiendo bien con ayuda de unos palillos mejor.

Ponemos a freir el bacon (o jamón) y las setas (por separado), y cortamos todos los ingredientes en una especie de juliana un poco más ancha, vamos en tiras con un grosor de entre 0.5 y 0.75 cm(si son más finas podréis manejarlo mejor).

Colocamos la esterilla estirada sobre una superficie lisa y despejada, y le ponemos encima una tira de fim transparente que la cubra entera pero no sea mucho mayor. Sobre ella situamos las algas; con las marcas o lineas perpendiculares a nosotros. El alga se puede tostar antes ligeramente para que sea más digestiva pero yo no lo hago.
Sobre ella extendemos una capa fina de arroz que cubra todo el alga salvo los dos dedos finales del lado opuesto al que queda cerca nuestro(esto se hace para que cierre bien).
Ahora rellenamos los diferentes makis, estos hago yo:
1ºSobre el arroz situamos tiras de bacon frito y plátano; sería como medio plátano en tiras y 3 lonchas de bacon, de modo que pueda cerrarse pero quede bien relleno. Se enrolla como lo haríamos con una cartulina, apretando con ayuda de la esterilla de tal modo que quede compacto y bien cerrado. En cuanto hagáis dos o tres os saldrá perfecto.
2ºColocamos mahonesa, unos granos de sésamo, surimi de cangrejo y aguacate y un poco de pepino.
3ºColocamos surimi de langosta, aguacate, setas (previamente cocinadas) y un poco de pepino.
4ºColocamos queso y salmón ahumado. Se puede poner un poco de pepino.
5º Colocamos mahonesa, atún y setas.
Como veis se puede hacer con muchísimas cosas, estos son algunos ejemplos pero también queda genial con sardinillas en conserva, con tortilla francesa (mejor hacerla echándole un chorrito de sake y de salsa de soja), con salchichas y un toque de kepchup y queso en tranchetes, con esparragos, bacon y huevo cocido...vamos, con casi cualquier cosa que se os ocurra.


No es necesario cambiar el film con cada rollito, pero si queremos conservarlos para más tarde es posible pero debemos dejarlos enrollados en film y mejor fuera de la nevera (salvo que sea de un día para otro).
Para cortarlas mojamos bien un papel de cocina en vinagre de arroz y lo pasamos por un cuchillo fino y bien afilado (esto ayuda a que n ose pegue el arroz al cuchillo) y vamos cortando despacito para que no se deshaga y mojando en cuchillo tantas veces como sea necesario. Este paso es muy importante hacerlo muy bien y con mucha paciencia, porque sino podemos "destrozar" los rollitos....Podeis ver en las fotos algunos más abiertos precisamente por la poca paciencia de mi querido marido...
Los colocamos en bandejitas y listo para servir.





どうぞお召し上がりください!!! (Itadakimashu o Buen provecho!!!)

(***Perdón por la calidad de las fotos pero lo pensé tarde y no la tenía preparada y mi movil no es un iphone precisamente :) )



viernes, 25 de marzo de 2011

CUENTOS DEL MUNDO: MOMOTARO, EL NIÑO MELOCOTÓN (JAPÓN)




Momotaro, the peach boy o el niño melocotón, es un cuento tradicional japonés muy popular que tuvimos el placer de escuchar de boca de nuestra amabilísima guía, durante nuestra visita a Hiroshima, mientras probábamos unos pastelitos con forma de "momotaro" rellenos de pasta de judía roja, por cierto, deliciosos.

En España lo encontramos publicado, con preciosas ilustraciones, dentro de la colección infantil de ediciones Santori , una editorial especializada en cultura japonesa que incluye todo tipo de libros.


" Hace mucho, mucho tiempo, en algún lugar de Japón vivía una pareja de ancianos.
Un día el anciano salió a la montaña a recoger leña mientras que la ancianita fue al río para lavar ropa. De repente, la ancianita vió que un enorme melocotón bajaba por el río, aguas abajo. Ella lo recogió y se lo llevó a casa.
El anciano al llegar a casa se sorprendió al ver tan enorme melocotón y dijo: "¡Qué melocotón tan grande!, ¿lo cortamos? y la anciana contestó: "¡Sí, vamos a cortarlo!" Pero antes de cortarlo, el melocotón empezó a moverse y de su interior salió un niño.
os ancianos se sorprendieron al ver a un niño salir de aquel enorme melocotón, pero también se alegraron porque como no tenían hijos, ese niño se convertiría en su único hijo. "¡Lo llamaremos Momotaro! porque nació de un "momo", dijo la anciana.
Momotaro comía mucho y creció fuerte y robusto. Nadie podía rivalizar con él. Era bueno y ayudaba a sus padres en todo lo que le pedían, pero había algo que preocupaba a los ancianos: Momotarono aún no había pronunciado ni una sola palabra


Por aquella época, unos demonios estaban causando alboroto y cometiendo fechorías por todo el pueblo, y Momotaro se indignaba y pensaba que: "¡Esta situación no lo puedo tolerar!".
Un día, de repente comenzó a hablar y dijo a sus padres: "¡Voy a castigar a los demonios! Me tenéis que ayudar a preparar mis cosas para salir a buscarlos." Los ancianos se quedaron sorprendidos al escuchar por primera vez la voz de Momotaro. Así que ayudaron a su hijo y le dieron ropas nuevas y "kibi dango" para que pudiera comer durante el viaje.
Momotaro partió hacia la isla de los demonios. Los ancianos rezaban para que su hijo se encontrara sano y salvo.
Momotoro se encontró en el camino con un perro. El perro le dijo: "¡Oye! Dame un "kibi dango" por favor. Si me lo das te ayudaré en lo que sea". Momotaro le entregó un "kibi dango" y empezaron a caminar juntos.
Poco después se encontraron con un mono, el cual pidió a Momotaro lo mismo que el perro. Momotaro cogió un "kibi dango" y se lo entregó, y los tres empezaron la marcha nuevamente.
En el camino a la isla del demonio, encontraron a un faisán, el cual pidió lo mismo que los anteriores y se unió al grupo.
Pasaron unos días y llegaron por fin a la "isla de los demonios". El faisán realizó un vuelo de reconocimiento y al volver dijo:"Ahora todos están tomando Sake". Momotaro pensó que era una buena ocasión y dijo:"Vamos".
Pero no podían entrar porque el portón estaba cerrado. En ese momento el mono saltó el portón y abrió la cerradura.
Los cuatro entraron a la vez y los demonios quedaron sorprendidos al verlos. El perro mordió a un demonio, el mono arañó a otro mientras que el faisán picoteaba a un tercero. Momotaro dio un cabezazo al jefe de los demonios y le dijo: "¡No hagási más cosas malas!". Los demonios contestaron: "¡Nunca más lo haremos!, ¡perdónanos!".
Momotaro los perdonó y recobró el tesoro robado, volviendo a casa sano y salvo con sus amigos y repartiendo las riquezas entre la gente del pueblo"